- La guerra en Ucrania genera gastos gigantescos a Rusia y sus finanzas ya no son las de antes. El conflicto se está extendiendo más de lo pensado.
- Una de las mayores necesidades para Rusia es hallar mercados donde vender su materia prima, en especial petróleo, algo que China necesita para sostener su crecimiento luego de la pandemia.
- China puede conseguir en Rusia petróleo barato ya que, sin los mercados occidentales a pleno por el boicot, China sería la única alternativa.
China está preparada para asociarse aún más con Rusia en términos de energía. ¿El objetivo? “Garantizar la seguridad energética en todo el mundo”, según dijo hace unos días su presidente Xi Jinping.
Las declaraciones se produjeron al mismo tiempo que el foro político intergubernamental G7 busca implementar nuevas medidas a las exportaciones de petróleo provenientes de Rusia.
La Televisión Central de China informó un resumen de las declaraciones del mandatario, que se realizaron a través de un mensaje como parte del Cuarto Foro Energético China-Rusia.
“China está preparada para una mayor asociación energética con Rusia, que promueva el desarrollo de la energía renovable y garantice de manera conjunta la seguridad energética a nivel mundial y la estabilidad de la cadena de suministros de la industria”, declaró Xi, según la cadena estatal del gigante asiático.
La reunión, que incluyó a todas las principales compañías energéticas de los dos países en cuestión, se produjo mientras el G7 se preparaba para imponer un límite de precios al petróleo de Rusia a partir de diciembre, con la intención de debilitar la capacidad moscovita de financiar su guerra contra Ucrania.
China y Rusia, alianzas por la oferta y demanda de petróleo
Las exportaciones de energía rusa a China aumentaron en valor cerca de un 65 por ciento en el 2022, y otro 10 por ciento en volumen, según dijo Alexander Novak, viceprimer ministro de Rusia.
En los últimos meses, Moscú se convirtió en el 4to centro comercial de yuanes en todo el mundo, al tiempo que el gobierno ruso busca aumentar sus vínculos con Asia en medio de las sanciones impuestas por Occidente.
El comercio bilateral entre los dos países estaría entre los 180 mil millones y 190 mil millones de dólares en 2022, según Igor Sechin, director ejecutivo de la mayor empresa de petróleo rusa que es propiedad del gobierno, Rosneft.
Su compañía es la encargada de suministrar cerca del 7 por ciento del crudo de China.
El proyecto de energía global Vostok Oil, dirigido por la petrolera estatal rusa, que combina los pozos petroleros que ya están operando y los que comenzarán a extraer crudo a finales de esta década, “asegura el suministro energético a largo plazo a los países asiáticos”, señaló Sechin, lo que contribuiría en la búsqueda de evitar la inestabilidad de precios.
A modo de respuesta al proyecto del G7 de imponer un tope de precios al petróleo de Rusia, el gobierno ruso prometió que desviará los suministros a los países que estén en contra de la propuesta, y China e India ya aumentaron sus compras petroleras a Moscú.