- Días atrás el Banco de Inglaterra intervino de palabra pero no fue suficiente.
- Grandes críticas del FMI y Moody´s a la política fiscal inglesa.
- Luego de la intervención se estabiliza el mercado de bonos y el precio de la libra esterlina.
El Banco de Inglaterra intervendrá para calmar el mercado de bonos británico al declarar que comprará tanta deuda pública como sea necesario para volver a restaurar la estabilidad financiera. Este descalabro se generó luego de conocerse la política fiscal del gobierno de Liz Truss.
Días anteriores el BoE intervino de palabra en el mercado, pero no parecio ser suficiente para lograr calmar al mercado. Esta nueva medida de emergencia evitará que el caos financiero se extienda por todo el país y afecte los flujos de crédito.
“Si la disfunción en este mercado continuara o empeorara, habría un riesgo material para la estabilidad financiera del Reino Unido”, dijo el banco central en un comunicado que inmediatamente alivió las presiones sobre los crecientes rendimientos de los bonos del gobierno británico. El Tesoro dijo que respaldará por completo las operaciones.
No obstante el derrotero de la libra esterlina continúa hacia abajo un 0,7% a 1,065 dólares, luego de haber caído a un mínimo de sesión de 1,0618 dólares.
El Banco de Inglaterra mantendrá su meta de reducción de 838.000 millones de libras (892 millones de dólares) de títulos gilt en 80.000 millones de libras para 2023. Pospondrá las ventas, las cuales se iniciarían la próxima semana.
Tanto el FMI como la agencia calificadora Moody´s criticaron duramente la estrategia económica británica días pasados. La intervención del FMI en la economía de un país miembro del G7 demuestra la gravedad de la situación inglesa que llevó al colapso de la libra esterlina y los bonos británicos.
Diferentes versiones se encuentran en base a una futura subida de la tasa de interés por parte del BoE en noviembre. El martes, su economista jefe, Huw Pill, dijo que es probable que el banco central entregue un aumento de tasas “significativo” cuando se reúna en noviembre. Ese aumento podría ser incluso de 200 puntos básicos.
Antes de la intervención los rendimientos de los bonos británicos a 30 años subieron más del 5% por primera vez en 20 años, luego de conocerse el comunicado cayeron más de 50 puntos básicos.
Las críticas del FMI se centraron en que las propuestas económicas que llevaron a la libra al mínimo histórico de 1,03 dólares el lunes, generaron una crisis de credibilidad luego de la reducción de impuestos y aumento de préstamos al mismo tiempo que el Banco de Inglaterra aumenta las tasas para bajar la inflación.
El Fondo Monetario Internacional y Moody´s: Dos severos críticos
La política fiscal del gobierno de Liz Truss fue percibida como una vuelta a las políticas de Margaret Thatcher de los años 80, época que trae muy malos recuerdos económicos a la población inglesa.
“Dadas las presiones inflacionarias elevadas en muchos países, incluido el Reino Unido, no recomendamos paquetes fiscales grandes y sin objetivos específicos en este momento, ya que es importante que la política fiscal no funcione en contra de la política monetaria“, dijo un portavoz del FMI.
Jim Reid, estratega de investigación de Deutsche Bank, describió la “reprimenda” como “bastante mordaz”.
En tanto que Moody’s remarcó que los recortes de impuestos no financiados han sido “negativos para el crédito” para Gran Bretaña, lo que arriesgó costos de financiamiento estructuralmente más altos que podrían debilitar la economía.
El FMI dijo que su plan fiscal del 23 de noviembre brindaría una “oportunidad temprana para que el gobierno del Reino Unido considere formas de brindar un apoyo más específico y reevaluar las medidas fiscales, especialmente aquellas que benefician a las personas de altos ingresos“.