- Mientras intentan lidiar con las altas tasas de interés y la morosidad, los bancos de inversión y consumo luchan por mantenerse saludables.
Durante la mayor parte de la pandemia las ganancias de los grandes bancos de inversión y consumo de los Estados Unidos se mantuvieron en niveles muy altos. Los accionistas disfrutaron de jugosos retornos durante este período y de una elevada valoración de sus activos.
Pero, tal como señalan los expertos, las ganancias de los bancos más grandes generalmente son producto de los altibajos que se producen en la economía donde operan. De modo que en una economía próspera la demanda de préstamos se dispara.
En cambio si la economía se desacelera, dicha demanda cae y los bancos deben contar con las suficientes provisiones para enfrentar el período de vacas flacas. A menudo muchos préstamos no se pueden cobrar y ocasionan pérdidas a las instituciones financieras.
No obstante, los bancos se las ingenian para sacar ganancias sea cual sea el escenario. En momentos de incertidumbre y volatilidad, los bancos de inversión manejan mejor sus negocios comerciales.
Mientras que cuando la economía es estable y saludable, sus mejores ingresos se derivan de los servicios de asesoría que prestan. Los directivos bancarios, entonces, deben identificar oportunidades y tratar de equilibrar su negocio con el ritmo de la economía.
Resultados pesimistas para el cuarto trimestre
Desde principios de 2020 la economía de los EE.UU ha transitado por períodos de alta volatilidad. El cierre ocasionado por la pandemia, los enormes estímulos endémicos que lanzaron una montaña de dólares a la calle y el posterior incremento de las tasas de interés.
En cada uno de estos períodos, la economía ha estado montada en una montaña rusa. La alta volatilidad en los últimos tres años ha puesto a prueba el desempeño de los ejecutivos bancarios. Unas veces para frotarse las manos y otras para llevarse las manos a la cabeza.
En el último trimestre de 2022 y durante todo el año pasado los resultados exhibidos desde la semana pasada por Bank of America, Goldman Sachs, Citigroup, JPMorgan Chase, Wells Fargo y Morgan Stanley, fueron poco optimistas.
Las ganancias año con año de los seis bancos estadounidenses más grandes cayeron un 20 % en el cuarto trimestre de 2022 en comparación con el mismo período de 2021. De 34 mil millones de dólares ese año bajaron a unos 27 mil millones de USD el año pasado.
Solo que algunos bancos sufrieron más que otros. Mientras las ganancias de JPMorgan y las de Bank of America vieron un moderado aumento, las de Goldman Sachs se fueron al piso al hundirse dos tercios.
Al parecer, tal disparidad se debe a las fortalezas distintas que tiene cada una de esas instituciones bancarias. Por ejemplo, cuando las tasas de interés aumentan JPMorgan y Bank of America suelen obtener mejores resultados debido al consumo de sus clientes.
Cuando aumentan los tipos de interés también se incrementa la diferencia (spread) entre las tasas pasivas (lo que ganan los ahorristas) y las tasas activas (la ganancia que obtienen los bancos por los préstamos).
Reservas de efectivo para afrontar las pérdidas
En 2022, los ingresos netos por intereses de los seis bancos más grandes aumentaron desde finales de 2021 hasta 2022, de 17 mil millones de dólares a 66 mil millones de USD.
Con las tasas de interés a niveles históricos, los clientes de los bancos (personas y empresas) tendrán mayores dificultades para pagar sus deudas. Por lo tanto, los bancos se ven en la obligación de hacer apartados de dinero para compensar las pérdidas generadas por los créditos.
Conforme comenzaron a subir las tasas de interés, los bancos tuvieron que reservar 7,200 millones de dólares aproximadamente para cubrir este déficit en el cuarto trimestre del año pasado.
El CEO de Bank of America, Brian Moynihan y el jefe de JPMorgan, Jamie Dimon, han vaticinado que este año la economía de EE.UU entrará en una leve recesión por efecto de las elevadas tasas de interés de la Reserva Federal.
No obstante, eso no ha impedido que las tasas de interés hayan ayudado a los bancos a obtener también ganancias más altas por su dinero. Al menos hasta ahora.
Caída del mercado bursátil arrastró a los bancos de inversión
Tras el desplome de los mercados de valores desde el año pasado, los ingresos de los bancos de inversión desde luego también cayeron. Para Goldman Sachs y Morgan Stanley tal caída representó una pérdida de 50% en sus ganancias.
Sin embargo, la diferencia entre las ganancias que obtuvieron los bancos de inversión y los bancos de consumo, no se explican simplemente por el desempeño que han tenido cada una de estas empresas financieras.
Las ganancias de Morgan Stanley relacionadas con los negocios que no pertenecen a la banca de inversión, fueron mejores que las de Goldman. En tanto que Wells Fargo nuevamente tuvo un mal trimestre, pese a ser un gran banco de consumo.
Sus ganancias se redujeron a la mitad con respecto a los niveles de hace un año. Los problemas regulatorios pesaron mucho sobre Wells. El banco tuvo que pagar una gigantesca multa de 1700 millones de dólares tras ser sancionado por la oficina de protección financiera del consumidor.
El banco fue acusado de administrar indebidamente varios miles de millones de dólares de las cuentas de sus clientes.
Esfuerzos de diversificación de Goldman fracasaron
Por otro lado, está el caso de Goldman, que intentó levantar un banco de consumo para diversificar su negocio. El problema es que ha tenido que reservar altas cantidades de dinero para cubrir los préstamos incobrables en ese departamento. Ahora ha reducido los esfuerzos en esa área en vista de que el negocio salió mal.
Al ser consultado, el jefe del banco, David Solomon, dijo que la empresa había hecho un gran esfuerzo en poco tiempo, sin tener el talento necesario, para alcanzar los objetivos empresariales trazados.
Una semana antes la firma despidió al 6,5% de su personal. Algo que están haciendo casi todas las empresas actualmente para tratar de reducir sus costos y en vista de sus perspectivas de un menor crecimiento este año.
En los últimos años, otros grandes bancos del país también han tenido que sortear crisis internas similares. Este tipo de situaciones no hace sino poner de relieve cómo ha cambiado el negocio bancario y lo bien que han sido administradas estas empresas.