¿Nos encontramos en un momento histórico sin igual para invertir en petróleo? En los últimos meses hemos podido ser testigos de una de las tormentas más convulsas y complejas de la industria del petróleo; una tempestad que no solo ha hundido el precio del barril de crudo, sino que ha conseguido algo que nunca había sucedido: El petróleo cotizó en valores negativos.
Ante esta oportunidad sin igual muchos se plantean invertir en petróleo. Sin embargo, el crudo y su precio están sometido a un seguido de conflictos, tensiones y dinámicas geopolíticas que –por su complejidad– consiguen, muchas veces, ahuyentar a sus inversores potenciales.
Afortunadamente tienes ante ti un artículo que, a modo de resumen ejecutivo, te dará las claves contextuales y los argumentos más importantes para que comprendas el mercado del petróleo y puedas invertir exitosamente en él. Además, también te explicaremos qué instrumentos financieros puedes utilizar para invertir en petróleo (algunos de ellos con comisiones del 0%).
El contexto imprescindible a conocer antes de invertir en petróleo
La incertidumbre provocada por el COVID-19 y su efecto en el petróleo: ¿Una oportunidad única para el inversor?
La pandemia global afecta a casi todos los países del planeta y plantea mucha incertidumbre de cara al futuro. En los actuales momentos solo sabemos que la economía sigue recibiendo las embestidas de la pandemia, pero aún no sabemos cuán severa será la recesión hasta que la hayamos superado.
Muchos esperan una recuperación de la economía en forma de “V”. Aunque a estas alturas parece más plausible pensar que la economía se recuperará con la forma del logo de Nike; es decir, con una economía que no volverá a los niveles de antes de la pandemia sino hasta finales del 2021 o incluso después.
En cualquiera de los anteriores escenarios habrá nuevas empresas que entren en escena, muchas ya no estarán más, y otras saldrán muy fortalecidas de la pandemia. Pero, con toda certeza, la economía mundial seguirá necesitando petróleo para poder continuar su rumbo.
En otras palabras: Que la demanda mundial de petróleo (y, consecuentemente, su precio) vuelva a la normalidad es solo cuestión de tiempo.
El petróleo y su importancia en la economía mundial
Cuando Edwin Drake descubrió el petróleo por allá en 1864 en el pequeño poblado de Pithole City, Pensilvania (EEUU), nunca imaginó la repercusión que ese viscoso líquido negro tendría en el mundo, el mismo que a la postre sería llamado desde “oro negro” hasta “excremento del diablo”.
La relevancia del petróleo en todos los sectores de la economía global hace que su precio sea objeto de obsesión en los mercados financieros. En el NYMEX de New York y en Londres, los dos mercados de futuros de petróleo crudo más grandes del mundo, se pueden llegar a comerciar en un día casi 30 veces la cantidad diaria de petróleo que los países del planeta requieren para funcionar.
En octubre de 2016 el tamaño de la industria de producción de petróleo crudo llegó a $1,7 trillones, casi 3 veces más que los $660 billones generados por el resto de las principales materias primas. En 2019, el consumo global promedio fue de 100 millones de barriles de petróleo al día.
El consumo de petróleo en el mundo no ha hecho otra cosa que crecer. En efecto, incluso durante la crisis del 2008, el consumo de petróleo apenas se vio afectado.
Desde el primer shock de los precios del petróleo en 1973, las principales economías, especialmente la de EEUU, han estado en jaque cuando ha habido un aumento de precios. Por ello, los EEUU han desarrollado una tecnología de fracturación hidráulica o “fracking” que bombea agua, arena y productos químicos bajo tierra a alta presión para liberar petróleo y gas.
El fracking se parece más a la fabricación que a la exploración y producción petrolera tradicional. Está estandarizado, disfruta de ganancias rápidas de productividad y el proceso comienza y se detiene dependiendo de si el precio es mayor o menor de $50 por barril (por debajo de ese precio el costoso proceso no sale a cuenta). Según AIE, Agencia Internacional de Energía, en EEUU aproximadamente la mitad de la producción total de crudo proviene del “fracking”. Es más, la Cuenca Pérmica, sede de la industria del fracking estadounidense, ya produce más petróleo que los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), incluyendo a Arabia Saudita e Irak.
Aunque la tendencia global es “descarbonizar” y “desfosilizar” la economía, utilizando y promocionando nuevas fuentes de energía (renovables, como eólica y solar), no es menos cierto que el petróleo sigue teniendo un gran peso específico en la economía internacional y lo continuará teniendo durante las próximas décadas hasta que se logre una transición energética de fósiles a renovables en la que el petróleo no tenga el peso que tiene en la economía actual.
La guerra de precios: ¿Un escenario favorable para invertir en petróleo?
Para comprender los conflictos que se han producido recientemente con el precio del petróleo tan solo debemos considerar los siguientes aspectos:
- En términos generales, el precio del petróleo se establece por simple ley de oferta y demanda. La pandemia del COVID-19 ha causado una fuerte caída de la demanda.
- Las potencias petrolíferas siguieron extrayendo barriles de crudo muy por encima del consumo mundial, lo que provocó que la oferta superara por mucho la demanda.
- Los excedentes de petróleo se pueden almacenar, a la espera de que los precios vuelvan a subir para venderse a un precio “normal”. Sin embargo recientemente se alcanzó el límite de almacenaje mundial de petróleo, razón por la cual el petróleo cotizó en negativo (te pagaban por “llevarte” los barriles, pues no había espacio para almacenarlos).
Con esto dicho, ¿cómo se desató la reciente guerra de precios del petróleo?
En marzo de 2020, el pacto entre la Organización de Países Exportadores de Petróleo y aliados, llamada también OPEP+ (23 países en total) fracasó en su intento de estabilizar la producción global para ajustarla a la demanda real que había en plena pandemia. Esto desató una guerra de mercado entre Rusia y Arabia Saudita que hundió el precio de las principales mezclas a niveles de 20 dólares por barril.
Posteriormente, se vieron obligados a recortar en 9,7 millones de barriles la producción petrolera mundial a partir del 1 de mayo de 2020 hasta abril de 2022. El acuerdo no estuvo exento de drama y tensión porque mientras la mayoría de las compañías petroleras, privadas y estatales, anunciaron recortes en sus planes de inversión para 2020, la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) mantuvo inalterada su estrategia presupuestaria.
Lamentablemente, el acuerdo petrolero entre OPEP, el cartel energético y México fue una victoria pírrica pues la pandemia sigue creciendo y la demanda sigue cayendo en picado. Por lo cual, recientemente Arabia Saudita declaró una reducción adicional de un millón de barriles diarios a partir de 1 de junio de 2020. De inmediato, el mercado reaccionó y los precios subieron ligeramente.
Como vemos, el establecimiento del precio del petróleo es un proceso complejo y en él participan tanto las leyes del mercado como los intereses geopolíticos. A grandes rasgos las potencias mundiales productoras de petróleo han jugado a dañarse mutuamente al negarse a recortar producciones (o al hacerlo tan tarde).
Han mantenido un pulso para demostrar su fuerza, debido al cual han hundido el precio del barril de crudo y creado un escenario idóneo para invertir en petróleo.
Llegados a este punto del artículo ya hemos establecido el contexto imprescindible. Con las bases establecidas, volvamos a la pregunta que nos ocupa: ¿Por qué deberías invertir en petróleo en pleno 2021?
4 Razones por las cuales invertir en petróleo ahora mismo
1. Vacunación masiva antes de fin de año y la vuelta a la normalidad en la demanda de petróleo
En los actuales momentos, se espera que para finales de 2021 una gran porción de países del mundo haya conseguido alcanzar la conocida inmunidad de rebaño al conseguir vacunar a más del 80% de su población. Es decir, hay razones para ser optimistas a medio plazo.
Además, casi todas las potencias mundiales y sus principales empresas farmacéuticas trabajan contrarreloj produciendo el máximo de vacunas posible y mejorando las actuales para que sean eficaces contra nuevas variantes y cepas de la COVID-19.
Por lo anteriormente expuesto, creemos que la caída de la demanda de petróleo terminará a fines de este año, lo que implicará una subida de los precios del barril de crudo.
2. Los recortes de OPEC+ y Arabia Saudita
Las iniciativas OPEP+ y G20 impactarán en el mercado petrolero de tres maneras. Todas ellas ya están contribuyendo o contribuirán al aumento de los precios del barril de crudo y sus derivados directos:
- El recorte de producción de la OPEP+ en mayo para alcanzar la línea de base en realidad será de 10,7 mbd (millones de barriles por día) y no de 9,7 mbd. Esto proporcionará un alivio inmediato del excedente de oferta en las próximas semanas, reduciendo el pico de acumulación de existencias.
- Cuatro países (China, India, Corea y Estados Unidos) han ofrecido su capacidad de almacenamiento estratégico a la industria para almacenar temporalmente barriles no deseados o están considerando aumentar sus existencias estratégicas para aprovechar los precios más bajos. Esto creará un margen adicional para la inminente acumulación de existencias.
- Otros productores, con Estados Unidos y Canadá a la cabeza, podrían ver una caída de la producción de alrededor de 3,5 mbd en los próximos meses debido al impacto de los precios más bajos. La pérdida de este suministro, combinada con los recortes de la OPEP+, provocará un déficit en el mercado en la segunda mitad de 2020.
Si la producción cae bruscamente y la demanda comienza a recuperarse, la demanda excederá la oferta en la segunda mitad de 2021. Esto permitirá que el mercado comience a reducir el exceso de existencias masivo que se acumularon en la primera mitad del año 2020. Este escenario presionará hacia arriba los precios del petróleo antes de fin de año.
3. La disminución del gasto en producción de petróleo impactará en la oferta futura de petróleo
Otro elemento a tener en cuenta en el análisis del mercado petrolero es la significativa disminución del gasto de capital de las compañías en exploración y producción en 2020. Se estima que bajará en aproximadamente un 32% en comparación con 2019 y será solo de $335 mil millones, el nivel más bajo en 13 años. Se espera, por tanto, que la producción no pueda suplir la demanda cuando ésta suba a medida que el mundo vuelva a la normalidad. Creemos que este escenario contribuirá inequívocamente al alza en los precios del barril de petróleo, incluso a niveles superiores a los precios prepandémicos.
4. Las empresas petrolíferas gozan de fortaleza suficiente para superar la crisis
Fijémonos por un momento en Shell, una de las multinacionales más grande del mundo y una de las 4 mayores empresas del sector petrolífero: A pesar de un primer trimestre muy sólido, Shell redujo su dividendo en un movimiento que sorprendió a casi todos. Sin embargo, la gerencia quiere preparar a la compañía para tiempos aún más duros, lo cual es un objetivo prudente y conservador.
Shell tiene una deuda significativa en su balance general, pero no debería tener problemas de iliquidez por las siguientes razones:
- Cuenta con una calificación crediticia AA2, que le otorga uno de los balances más saludables en su industria.
- La compañía está bien diversificada tanto geográficamente como en lo relativo a sus unidades de negocio. De esta forma, refinación, comercialización, GNL, productos químicos, etc., proporcionan ingresos significativos en tiempos de bajos precios del petróleo.
- El recorte de dividendos significa que Shell ahorrará $10 billones el próximo año, lo que alivia la necesidad de caja.
- Por ser una empresa con sede en Europa, Shell se beneficia de la compra de bonos del Banco Central Europeo, lo que le da acceso a una deuda con baja tasa de interés.
- Que la gerencia de Shell haya decidido reducir el dividendo, a pesar de su robusto balance y la sólida generación de efectivo durante el primer trimestre, plantea la pregunta de si sus competidores la emularán. La prudente estrategia de Shell puede tener un efecto negativo a corto plazo en el precio de las acciones de la empresa –al recortar los dividendos sus acciones pueden parecer menos atractivas para los inversores– pero añade más solidez al futuro a medio plazo de la multinacional.
Shell cuenta en su balance con la mayor deuda neta (ajustada por efectivo) de $48 mil millones. Sus pares, BP (BP) y Exxon Mobil (XOM), tienen una deuda casi tan alta, mientras que Total (TOT), Chevron (CVX) y especialmente ConocoPhillips (COP) tienen una deuda significativamente menor. Debido a que, en términos absolutos, la deuda neta no dice demasiado, tiene sentido medirla en relación con los activos y/o el EBITDA.
Sobre la base de la resiliencia del balance, Exxon Mobil y BP se ven algo más débiles que Shell, mientras que Total, Chevron y ConocoPhillips tienen balances más sólidos. Todo esto demuestra que casi todas las empresas del sector son fuertes y, bajo la adecuada dirección, seguramente saldrán adelante una vez terminada la pandemia, razón por la cual las recomendamos ya sea a través de un un ETF o invirtiendo directamente en ellas.
¿Cómo invertir en petróleo? Los instrumentos financieros para articular la inversión
A modo de conclusión, creemos muy recomendable invertir en petróleo cualquiera que sea el horizonte de inversión. Consideramos muy probable que los precios del petróleo se ubiquen, a finales del 2021, alrededor de los $90 por barril.
En este apartado veremos los instrumentos más habituales y recomendables que encontramos para invertir en petróleo mediante el bróker eToro.com, una plataforma de inversión utilizada por más de 10 millones de usuarios, con sede en Londres y autorizada por el CySEC y la FCA (la entidad reguladora del Reino Unido).
En España, eToro está registrado en la Comisión Nacional del Mercado de Valores con número de registro 2534 (aquí su registro).
El primer paso para poder invertir en petróleo (y sus productos derivados) es abrir una cuenta con el bróker mencionado, si es que aún no dispones de ella.
> Ir a eToro.com para abrir una cuenta <
Otro punto importante a favor de eToro es que nos permite añadir fondos a tu cuenta de forma inmediata mediante tarjeta de crédito, Paypal o transferencia bancaria (entre otros).
Además, eToro ha pasado con éxito nuestro proceso de verificación y auditoría: Lo que significa que cuenta con todas las garantías, estándares de seguridad, fiabilidad y liquidez que exigimos a un bróker para aprobar con éxito nuestras altas exigencias.
Con este primer paso completado, veamos de qué instrumentos financieros disponemos para articular la inversión en petróleo y aprovechar este momento histórico en el que nos encontramos:
a) Inversión directa en petróleo mediante CFD (inversión mínima: $200)
Un método directo de invertir en petróleo es mediante la compra de contratos por diferencia (CFD, por sus siglas en inglés) de petróleo. El CFD OIL (https://www.etoro.com/markets/oil/) nos da exposición directa al precio del barril de petróleo crudo, cuyo precio replica siguiendo directamente la cotización del barril West Texas Intermediate, punto de referencia para fijar los precios del petróleo.
Los CFD son productos financieros que permiten apalancamiento (invertir más dinero del que realmente disponemos) y tienen comisiones de custodia variables. Por ello, invertir en petróleo mediante CFDs es un opción recomendada para aquellos que tengan un perfil especulador y un horizonte cercano, que deseen mantener su inversión por un breve periodo de tiempo y poder invertir más dinero del que poseen mediante el apalancamiento.
b) Inversión directa en petróleo mediante ETFs
Otro método directo de invertir en petróleo es a través de la inversión en fondos cotizados en bolsa (ETF) basados en petróleo. Los ETF se cotizan en una bolsa de valores y se pueden comprar y vender de manera similar a las acciones. Por ejemplo, comprar una acción del Fondo de Petróleo de los EEUU (USO) nos da exposición equivalente a un barril de petróleo.
Para consultar la inversión mínima del ETF United States Oil Fund dirígete a : https://www.etoro.com/markets/uso.
En otras palabras: al ser un producto que nos da exposición directa al precio del petróleo West Texas Intermediate es muy recomendable para todos aquellos con un perfil de inversor y un horizonte a medio o largo plazo. Para la mayoría de lectores este producto puede ser la opción más recomendable al tener menos riesgos al no ser un producto apalancado.
c) Invertir en petróleo de forma indirecta mediante acciones de empresas petroleras
Como ya hemos mencionado, casi todas las empresas del sector tienen balances muy resilientes y están implementando una estructura de capital y una política de dividendos muy acertadas. Muchas de estas empresas tienen expectativas de crecimiento importantes en los próximos años, sobre todo cuando los motores de la economía global vuelvan a su “velocidad nominal”.
Cabe mencionar que aunque invertir en estas empresas petroleras no nos da exposición directa al petróleo, la cotización de las acciones de estas empresas mantiene una fuerte correlación con el precio de los barriles de brent.
A pesar del recorte de dividendos, Shell parece una sólida elección de valor y representa una buena posibilidad, para cualquier portafolio, de lograr un buen rendimiento a largo plazo, principalmente porque el precio de sus acciones en el mercado (unos $30 a fecha de redacción) está muy por debajo de su valor intrínseco. La recomendamos con un target price de $65 por acción a finales de 2024.
Para invertir en Shell a través de eToro encontramos que existen 2 variantes de acciones de la empresa disponibles: RDS.A y RDS.B. Ambos son las mismas acciones de Shell, pero el tipo A (RDS.A) está sometido a impuestos sobre dividendos en país de orígen. Por ello, por norma general y estando ubicado en España o Latinoamérica, es más recomendable escoger el tipo B (RDS.B): https://www.etoro.com/markets/rds.b
Por supuesto, en eToro también tenemos opción de invertir en las principales empresas petroleras del mundo, como BP (la podemos encontrar buscándola bajo el símbolo BP.L), Exxon Mobil (símbolo XOM), Total (FP.PA), Chevron (CVX) y ConocoPhillips (COP), entre otras.