- La bancarrota del Silicon Valley Bank fue causada por una mala gestión y supervisión, lo que ha llevado a la Reserva Federal de EE. UU. a proponer cambios regulatorios y de supervisión para evitar futuras quiebras.
- Se espera que se fortalezca la supervisión, se implementen requisitos de capitalización y liquidez, y se preste especial atención a los riesgos relacionados con las fintech y los criptoactivos.
- La crisis también demostró la importancia de una regulación más estricta para los bancos medianos y la necesidad de actuar rápidamente ante situaciones similares en el futuro.
Michael Barr, Vice Chair for Supervision de la FED, dijo en la Cámara de Senadores estadounidenses que el desplome del banco californiano Silicon Valley Bank fue una consecuencia directa de una mala administración, pero dejó entrever que, además, fue un caso con una supervisión muy mal gestionada.
Las palabras de Barr anticiparon un informe de la Fed que busca entre sus conclusiones implementar modificaciones que endurecerán la regulación y la supervisión de las financieras medianas.
El informe detalla expresamente algunos datos importantes acerca de las causas de la quiebra de SVB y dice que el banco no supo o no quiso gestionar sus riesgos.
Sin embargo, agrega que los supervisores de la FED no habían apreciado los problemas que podrían provocar las fragilidades de un crecimiento fuera de lo normal del Silicon Valley Bank.
El informe dice también que incluso los supervisores, al momento de detectar esas vulnerabilidades, no tomaron las decisiones rápidas y adecuadas para garantizar que el banco pueda solucionar el problema.
También indica el estudio que con las modificaciones legales durante la gestión del expresidente Donald Trump se habían delegado a la Fed competencias regulatorias para las entidades medianas, lo que fue un error.
Reforzar la regulación: el caso SVB
El informe, Barr dice que luego de la insolvencia del SVB, están intensificando la supervisión y regulación de la Fed sobre esta situación. Dijo que hay que revisar “todos los procesos” y que deben “autoevaluar profundamente las condiciones que han llevado a la bancarrota” al banco estadounidense. Esto incluye la labor que desempeño en la supervisión y regulación la Reserva Federal.
“Lo primero que se debe hacer es perfeccionar la velocidad, la solidez y la destreza de la supervisión”, dice el texto. La publicación también avanza sobre diversas propuestas para ajustar este trabajo, en especial de los bancos que están teniendo un crecimiento veloz. Con el sistema actual, según Barr, si una entidad crecía sustancialmente, la Fed demoraba mucho en la supervisión.
En paralelo, Barr propone la atención a los riesgos particulares, algo muy frecuente en las entidades que crecen velozmente, los modelos de negocio concentrados y diversas circunstancias especiales, independientemente del tamaño de sus activos. El foco estará centrado en los riesgos por transacciones con las fintech y los criptoactivos.
Por otra parte, ahora van a llevar a cabo lo que llaman una “cultura de la supervisión” para accionar rápido ante situaciones como la del Silicon Valley Bank.
La entidad tenía más de 30 advertencias de supervisión de seguridad y solidez no resueltas, más del 75 por ciento del promedio de las entidades de su grupo.
Por otra parte, la Reserva Federal será más proactiva al momento de exigir requisitos de capitalización y liquidez o de la prohibición del pago de ganancias y ciertas retribuciones a los dirigentes a bancos donde hayan vulnerabilidades.
En el caso de la entidad de California, los supervisores no actuaron a tiempo y dejaron que las deficiencias empeoraran mientras buscaban pruebas adicionales, a pesar de que los problemas eran claros y crecientes.
La experiencia del SVB
Esto es lo referido a la supervisión estrictamente, aunque se prevén más modificaciones en lo relacionado a las regulaciones. La norma delega en la Fed parte de las leyes y ahora el banco central reconoce además que fueron muy laxos con los bancos de 100 mil a 250 mil millones de dólares de activos.
Su experiencia después de la declaración de bancarrota de Silicon Valley Bank demostró que conviene la aplicación de reglas más estrictas a una cantidad más amplia de bancos, declaró la Fed, que señala su próxima revisión de las regulaciones para las financieras con 100 mil millones de dólares o más en activos.
La bancarrota SVB además demostró el modo en que los problemas de un banco mediano y no sistémica pueden tener resultados sistémicos incluso si no es de gran tamaño, no se encuentra conectada con otros o no proporciona servicios financieros esenciales.
Lo que sucede en estos casos es el contagio, el terror a que las dificultades de un banco afecten también a otros.

Luego del desplome de la financiera de Silicon Valley hace dos meses, las autoridades han intervenido en Signature Bank en ese mismo momento.
También, han decidido políticas conteniendo la tormenta, que todavía tiene consecuencias. El caso de First Republic Bank es uno de ellos.
Cambios en las regulaciones
En resumen, la regulación de los bancos va a ser más estricta en el futuro. Se les va a exigir que tomen en cuenta las ganancias y pérdidas potenciales de sus inversiones al calcular cuánto capital necesitan para cubrir sus riesgos.
La crisis del banco en California demostró la importancia de tener suficiente capital bancario. La regulación va a cambiar, pero llevará tiempo implementarla.
El informe también habla sobre cómo las redes sociales y la tecnología pueden haber hecho que la retirada de depósitos ocurra más rápido.
El informe revisa la administración y supervisión del banco y contiene información confidencial sobre su historial de supervisión.
El presidente de la Fed está de acuerdo con las recomendaciones del informe y confía en que ayudarán a tener un sistema bancario más sólido.