- Los altos precios de los bienes y servicios deberían comenzar a caer junto con los precios del petróleo, señala el banco.
- Antes de que la Fed decida un cambio de marcha respecto a las tasas de interés, JPMorgan y los inversionistas esperan un nuevo aumento sustancial.
El analista de JP Morgan, Marko Kolanovic, considera que el problema de la inflación en los Estados Unidos tenderá a resolverse solo, a medida que la Reserva Federal (Fed) se incline hacia un pivote y se desvanezcan las distorsiones en la economía causadas por la pandemia de coronavirus.
Conforme vayan retrocediendo los altos niveles de inflación registrados, el mercado bursátil debería obtener un nuevo impulso. “La Fed ha reaccionado de forma exagerada con un aumento de 75 pb. Es probable que veamos un giro de la Fed”, afirmó Kolanovic.
La inflación debe caer al disminuir los precios de la energía que afecta a todos los demás sectores económicos. La caída de los precios del crudo y la resolución de los problemas de la cadena de suministros deberían provocar un efecto positivo sobre la inflación, señaló el estratega.
Powell está reaccionando de forma exagerada
La principal preocupación para la Fed y para los inversores durante el último año ha sido la indomable inflación. Los formuladores de políticas del banco central estadounidense se han concentrado en resolver este problema creado por los estímulos pandémicos, la guerra de Ucrania y los cuellos de botella de la cadena de suministros.
La creciente inflación ha alcanzado máximos históricos de cuatro décadas. Para detener los altos niveles de precios, la Fed y todos los demás bancos centrales del mundo han aprobado una serie de aumentos de las tasas de interés. Al encarecer el costo del dinero, esperan que los costos de producción y venta de los bienes y servicios disminuyan.
Sin embargo, Kolanovic teme que el presidente de la Fed, Jerome Powell, reaccione de forma exagerada y aumente las tasas otros 75 puntos básicos durante la reunión de septiembre. El estratega es del criterio de que el organismo debe parar los altos aumentos de tasas.
Mientras tanto en Wall Street las expectativas reinantes son que la Fed nuevamente subirá los tipos de interés en 75 puntos básicos.
“Sostenemos que la inflación se resolverá por sí sola a medida que desaparezcan las distorsiones y que la Fed haya reaccionado de forma exagerada con alzas de 75 puntos básicos”, señaló Kolanovic. Aunque agregó que “es probable que veamos un giro de la Fed, lo que es positivo para los activos cíclicos”.
Optimismo para el segundo semestre del año
Además de las decisiones de la Fed, otros factores podrían mejorar la economía de los EE. UU. este año, según Kolanovic. La recuperación de China en el segundo semestre del año, la ausencia de una recesión global y el posicionamiento muy bajista de los fondos de inversión sistemáticos y discrecionales.
El estratega considera que el objetivo S&P 500 para fin de año será de 4.800 puntos. De lograrse tales niveles de aumento implicaría un potencial alcista del 16 % con respecto a los actuales niveles, explicó Kolanovic.
Otro elemento que podría llevar a la Fed a no aumentar tanto las tasas de interés es la cercanía de las elecciones de mitad de período. Empujar a la economía a una recesión para frenar la inflación no lo agradecerían los votantes.
“Dado el retraso que tardan las subidas de tipos en funcionar a través del sistema y con solo un mes antes de unas elecciones estadounidenses muy importantes, creemos que sería un error que la Fed aumentara el riesgo de un error de política agresiva y pusiera en peligro la estabilidad del mercado”, puntualizó Kolanovic.
La Fed sigue con la esperanza de controlar la inflación sin que esto signifique un aterrizaje forzoso. Todo dependerá de si comete o no un error de política monetaria. Para Europa JPMorgan no tiene la misma perspectiva. Los altos precios de la energía y la dependencia del gas de Rusia, no presagian un mejoramiento de los niveles de inflación.
Recuperación de las acciones bursátiles
El banco de inversión confía en que los stocks se recuperen en la segunda mitad del año con el enfriamiento de la inflación. Durante la reunión de septiembre del Comité de Mercado Abierto Federal (FOMC en inglés) se producirá un nuevo macro aumento de las tasas. JPMorgan espera que los formuladores de políticas suban las tasas en 0,75 %.
Pero, conforme la inflación vaya decreciendo, según indican los datos y la Fed dé un giro a partir de entonces, las acciones retomarán su racha alcista, pronosticó JPMorgan. Pero antes de eso, los inversionistas deberían esperar otro aumento descomunal de los tipos de interés.
Según Mislav Matejka, analista de JPMorgan, la inflación está mostrando signos de enfriamiento con la caída de los precios de las materias primas. Pero la Fed no va a disminuir por ahora el nivel de incremento de las tasas. Al menos hasta la reunión de finales de septiembre.
Con un nuevo aumento de 75 puntos básicos, las tasas de interés de referencia se ubicarían por encima del 3%. Ese es el mismo nivel que tuvieron en 2008 con la crisis financiera mundial. Solo que después de Septiembre, Matejka espera que la Fed asuma una postura más flexible y tanto el ritmo como los ajustes de las tasas sean menores.
“Ahora que la tasa de fondos de la Fed se ha movido por encima de lo que tradicionalmente se considera un nivel neutral , lo más probable es que la Fed se vuelva más sensible al flujo de datos entrante”, afirmó Matejka.
¿Tiempo de reducir la velocidad de los aumentos de tasas?
Hay suficientes datos que demuestran que la economía se está enfriando. Así lo muestran los precios de las viviendas, la gasolina que ha bajado considerablemente y los precios de los productos básicos como el trigo cayendo.
Los analistas ven una amplia posibilidad de que la Fed concluya que es tiempo de deducir el ritmo de los futuros aumentos de tasas de interés. Entonces podría cambiar de dirección y esperar a ver cómo reacciona la economía.
“De hecho, nuestros economistas creen que la inflación se moverá materialmente a la baja”, indicó Matejka. Los pronósticos del banco es que la inflación interanual del IPC de los Estados Unidos disminuirá del 8% registrado recientemente a el 3% para julio del próximo año.
“Los futuros de inflación muestran un fuerte vínculo con el precio del Brent, y el reciente debilitamiento es bienvenido por las tendencias de la inflación”, explicó Matejka. “Esperamos otra subida desmesurada de la Fed en septiembre, pero publicamos que buscaríamos que la Fed no sorprendiera a los mercados del lado de línea dura de nuevo”, agregó.