- India es uno de los mercados mundiales con mayor horizonte para los inversores. Con más de 1,38 mil millones de habitantes y una clase media en crecimiento, empresas de todo el mundo desembarcan en busca de oportunidades.
- Un dato clave: más de la mitad de los habitantes de la India no tiene más de 25 años de edad, algo que la convierte en un terreno muy atractivo para el futuro de los negocios.
- Pero hay problemas en su democracia que amenazan con echar todo por la borda.
Las últimas movilizaciones motorizadas por el partido opositor más importante están revirtiendo el clima de inversión en India, el país que tiene los mayores índices de crecimiento global en desembarco de compañías extranjeras.
Las protestas obedecen a la escasez de productos y al desempleo, que ha venido aumentando muy levemente en las últimas mediciones, al igual que la inflación.
Las manifestaciones comenzaron como cualquier otra en cualquier lugar del mundo: un partido de la oposición con poco peso electoral ha salido a las calles en contra del gobierno del primer ministro Narendra Modi, integrante del Partido Popular Indio.
Pero la manifestación giró radicalmente cuando se sumaron legisladores miembros del Partido del Congreso, el otro gran partido del país.
Rahul Gandhi también fue a las manifestaciones. No es un dato menor, se trata del principal opositor de Modi durante las últimas elecciones.
La manifestación comenzó siendo pacífica, pero se desbordó y tuvo que intervenir la policía.
Luego de estos hechos, Gandhi posteó en Twitter que la democracia en el país ha pasado a la historia. En la publicación agregó imágenes de su detención en donde se lo podía ver con otros dirigentes de su facción.
Además de él, muchas personas creen que el sistema de gobierno está siendo socavado en la India, el país democrático con la mayor población del mundo, con 1,38 mil millones de habitantes.
Qué está pasando en la India: ¿invertir es una opción?
Analistas y detractores de las autoridades indias señalan que la Justicia tiene cada vez menos independencia.
También que la libertad de prensa y de expresión está muy comprometida y que las minorías religiosas están frente a graves persecuciones por parte de los nacionalistas hindúes.
En paralelo, las movilizaciones pacíficas están siendo reprimidas con el arresto de dirigentes.
Arundhati Roy, escritora, periodista y activista india, dijo que casi todas las antiguas colonias tuvieron problemas para la instalación de gobiernos democráticos estables.
Según Roy, India ha sido exitosa en ese sentido, mucho más que otras ex colonias, pero ahora, a 75 años de su independencia, “es traumático observar la desmantelación sistemática y tan violenta de la democracia”.
Del otro lado, los ministros del gobierno aseguran lo contrario: que los principios democráticos continúan teniendo vigencia y no sólo eso, mejoran.
El ministro de relaciones exteriores, Subrahmanyam Jaishankar, por ejemplo, declaró que si actualmente prevalece en el mundo la idea de que la democracia es, en cierto modo, el mejor sistema de gobierno del mundo es debido a la India. Y agregó que en un momento su país llegó a ser la única democracia en el Oriente.
75 años de democracia en India
El 15 de agosto de 1947, durante la noche, se oyeron las declaraciones del primer dirigente democrático que tuvo la India: Jawaharlal Nehru.
Nehru dijo: “Mañana, India se va a despertar y conocer lo que es la vida en libertad”.
De esa manera comenzaba el traspaso de ser una colonia británica a convertirse en un país democrático, el primero en el sur asiático. Un sistema de gobierno que transformó una nación con grandes niveles de pobreza a uno con una economía que crece a niveles récord y que negocia con las potencias mundiales.
Además, contrarresta el peso de China, su vecino autoritario.
Excepto por una interrupción dictatorial en 1975, la India se aferró a los principios de la democracia, con elecciones libres, un poder judicial independiente (que incluso tuvo duros enfrentamientos con el ejecutivo), una prensa y una oposición poderosas y transiciones de poder habitualmente normales.
A pesar de ello, analistas políticos señalan ahora que el Estado perdió muchos de sus valores democráticos y lentamente se está desviando de sus compromisos originales.
Los expertos dicen que esto ocurre desde antes de la asunción de Modi en 2014, pero que con él se ha acelerado.
Lo acusan que ser un gobierno populista que utilizar el poder para debilitar las libertades democráticas y llevar a cabo un proyecto nacionalista hindú.
Dudas respecto de la democracia
Staffan I. Lindberg, director del Instituto V-Dem, un instituto de investigación independiente de Suecia que analiza las democracias a nivel global, indicó en una conferencia en Londres que “el daño parece seguir” en la India de Modi y que ese avance “impacta sobre muchas instituciones vitales para la democracia”, como la libertad de expresión y las manera alternativas de conseguir información, como las redes sociales.
El partido oficialista lo niega rotundamente.
Su vocero, Shehzad Poonawalla, expresó la semana pasada que su país es “extremadamente democrático” con el gobierno de Modi y que gracias al gobernante “se recuperó la república”.
Crisis de crecimiento
Casi todas las democracias pasan por malos momentos, pero es la primera vez que hay varios estados que están experimentando estos retrocesos, según señaló en un informe del 2021 el Instituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral.
En la lista están EE.UU, Brasil y, precisamente, India. Figuran como “países en los que el sistema democrático se encuentra frente a dificultades”.
Las dudas sobre la democracia india logró que Freedom House, la ONG de los Estados Unidos, la deje de considerar como tal y caracterice a la nación oriental como “parcialmente libre”.
El Instituto V-Dem la tildó de “autocracia electoral”, del mismo modo que Rusia.
Además, el indicador de la democracia que realiza The Economist, más específicamente su Unidad de Inteligencia, ha descrito al país asiático como una “democracia fallida”.
The Economist dice que el primer ministro proclama valores democráticos, pero en su gobierno “las instituciones están siendo coaccionadas”.
La Justicia investigada: una debilidad a la hora de invertir en India
Los analistas más críticos dicen que hay una enorme cantidad de casos sin resolverse en la Suprema Corte de Justicia en los cuales se pone en duda la constitucionalidad de políticas impuestas por las autoridades.
Entre estas denuncias se incluye la llamada “revisión de la ciudadanía”, norma que pone en peligro los hogares de más de 1,9 millones de personas que viven en el estado de Assam, la revocación de poderes que permitían una semi autonomía a Cachemira y leyes sobre financiamiento de campañas electorales que benefician desproporcionadamente al partido oficialista.
Además, hay denuncias sobre una supuesta utilización de un software militar para vigilar ilegalmente a periodistas y políticos.
Deepak Gupta, ex juez de la Corte Suprema, indicó en un escrito publicado por la prensa local, que la democracia india se encuentra en pleno retroceso “por la incapacidad que posee esa institución para garantizar las libertades civiles”.
El ex juez dijo que se niegan fianzas y que se hace mal uso de las normas sobre la sedición y el terrorismo ejercido por las fuerzas policiales. Remarcó, sin embargo, que estos procedimientos ya han sido utilizados por otros gobiernos previamente.
Un mundo complejo
La India es una nación en la que coexisten dos grandes culturas, si bien los hindúes son mayoría, hay unos 200 millones de musulmanes.
Su historia ha estado cruzada desde siempre por violencia sectaria, pero en los últimos años, la intolerancia contra los musulmanes ha aumentado.
En muchos estados en los que gobierna el partido del primer ministro se demolieron hogares y negocios de supuestas personas que protestaron contra el gobierno y son musulmanes. Se interpreta como un modo de castigo a una comunidad entera.
Un dato importante: es la primera vez en toda la historia del país que el partido oficial no tiene ningún legislador musulmán en las Cámaras, en medio de un auge nacionalista que le está otorgando cada vez más triunfos electorales al dirigente del Partido Popular Indio.
Durante el mandato de Modi, el Parlamento ha aprobado leyes de gran importancia casi sin debates, entre las que se incluye una acerca de la ciudadanía asociada a la religión y una controvertida reforma agraria que dio lugar a multitudinarias protestas.
Si bien es cierto que el gobierno retrocedió con la reforma, situación que muchos consideraron como un éxito de la democracia, lo cierto es que lo hizo por las presiones de la prensa.
India: escenario fértil para los negocios
El mercado de la India es el que mayor crecimiento tiene a nivel mundial, es la China de esta década.
Por ello es que empresas tecnológicas y minoristas de diferentes países occidentales se han puesto como objetivo al país asiático para generar mayor volumen de negocio.
No es un mercado menor. India posee más de mil trescientos millones de habitantes y más de la mitad no tiene ni 25 años de edad, algo que la convierte en un terreno muy atractivo para el futuro de los negocios.
Algunas multinacionales que han abierto tiendas en los últimos años son: Ikea, que abrió en 2019 su punto de venta más grande del mundo; Walmart, asociada con la empresa india de comercio electrónico Flipkart; Amazon y muchas más.
La ONU señaló este año que el país gobernado por Xi Jinping va a dejar de ser el gigante asiático debido a su cantidad de habitantes, dejándole lugar a la India.
Para 2050, la población de esta nación se estima que va a representar casi el 20 por ciento de la población mundial.
La experiencia de Reliance
Ese marco de desarrollo sostenido se ha logrado por medio de muchas políticas convergentes, y aunque no existe sólo una causa, el hecho clave es la masificación de los teléfonos inteligentes y la conexión a la red de millones de habitantes de la India que no tenían acceso a las nuevas tecnologías.
Existe un caso que es un paradigma y que pudo haber marcado un hito en este sentido: el crecimiento de Reliance Jio, la empresa de telecomunicaciones india manejada por el magnate Mukesh Ambani.
En pocos años, Reliance Jio pasó a ser el proveedor líder en el acceso a la red de telecomunicaciones local a partir de una estrategia de bajos precios y planes de conexión imposibles de igualar por la competencia.
Con el apoyo del gobierno, Reliance Jio logró hacer crecer exponencialmente la cantidad de usuarios conectados en la India. Fue una estrategia de marketing clave para la marca, pero también para el desarrollo del país.
El éxito fue tan importante que la lucha de precios obligó a los rivales a tener que fusionarse para sobrevivir.
Un ejemplo, el precio de 1gb de datos móviles pasó en la India de 205 rupias (3 dólares) a 12 rupias (17 centavos de dólar), lo que le permitió a millones de habitantes poder acceder a la red por primera vez.
La conectividad como trampolín para las inversiones
Queda mucho camino por recorrer. Existen millones de indios sin conexión, si bien más de 695 millones de personas todavía tienen acceso. La multiplicación de conexiones a precios bajos fue un elemento clave para gran parte de la población, ya que pudo ingresar en el sistema.
En la actualidad, Reliance Jio, con más de 400 millones de clientes, es la segunda empresa en el mercado de las telecomunicaciones, sólo superada por la fusión de Vodafone-Idea.
Incluir a las personas que todavía no tienen acceso va a ser más complicado, ya que si bien el precio es más bajo, la relación con los salarios es alta.
El salario promedio en la India es menor a 450 dólares al año, según indica la OIT.