- Pfizer quiere el negocio de los medicamentos oncológicos que está desarrollando (y muy bien) Seagen.
- Entre otros productos, Seagen tiene bajo su control el tratamiento contra el linfoma Adcetris y el fármaco contra el cáncer de mama Tukysa.
- Pfizer no quiere que sus rivales, Merck Sharp & Dohme, Bristol Myers-Squibb, Abbvie y Johnson & Johnson, le ganen la carrera por los medicamentos contra distintos tipos de cáncer.
La empresa farmacéutica de origen estadounidense Pfizer utilizará su caja repleta de los ingresos por la venta de vacunas contra el coronavirus para llevar a cabo la segunda compra más grande de su historia.
El laboratorio con sede en Nueva York pagará 43 mil millones de dólares (alrededor de 40 mil millones de euros) por Seagen, una empresa de biotecnología enfocada en el desarrollo y la comercialización de terapias experimentales para el tratamiento del cáncer
A fines de febrero pasado, se conoció que la compañía estaba interesada en la biotecnológica, luego de que ésta no pudiera cerrar un acuerdo con Merck Sharp & Dohme para su venta a la otra gran farmacéutica norteamericana.
Es la segunda mayor compra de la historia de Pfizer, luego de la adquisición que llevó a cabo en 2009 cuando pagó 67 mil millones de dólares (62,7 mil millones de euros) por el laboratorio Wyeth.
Pfizer ofreció 230 euros por cada acción de la biotecnológica, según informó la propia farmacéutica esta semana, esto significa una prima de 32,6 por ciento respecto al cierre de operaciones de la semana pasada.
A través de un comunicado, Pfizer anunció que llegaron a un acuerdo con el consejo administrativo de Seagen. El laboratorio estadounidense pretende financiar la compra principalmente a través de 31 mil millones de dólares en nueva deuda a largo plazo.
Por qué Pfizer compra Saegen
Como era previsible, la operación no se cerrará hasta finales de este año o comienzos del 2024, luego de que los accionistas de la biotecnológica vendan y de que las autoridades de la competencia den el visto bueno para la compra.
La empresa de biotecnología es conocida por formar parte del grupo de desarrollo de tratamientos experimentales contra el cáncer, algunas de estas terapias ya fueron aprobadas para tratar distintos linfomas y mostraron resultados prometedores contra otros tumores junto a otros tratamientos.
Seagen es considerada actualmente, y a falta de futuros tratamientos, de tamaño mediano, debido a que registró una facturación durante el año pasado de casi 2 mil millones de dólares, gracias a la demanda de sus tratamientos basados en anticuerpos, como el tratamiento contra el linfoma Adcetris y el fármaco contra el cáncer de mama Tukysa.
Los analistas estiman que estos ingresos se dupliquen para 2025, según los datos de Refinitiv recolectados por la agencia británica Reuters.
Los directivos de Pfizer creen que la biotecnológica podría aportar más de 10 mil millones de dólares en ingresos para 2030, con un crecimiento potencial importante después de 2030.
La compra no está libre de riesgos ya que la mayoría de los tratamientos por el momento son experimentales, a pesar de que cuando se lancen al mercado tendrán precios probablemente altos como otros anticuerpos.
Seagen, una mina de oro para Pfizer
La farmacéutica estadounidense necesita nuevas adquisiciones que vayan reemplazando los ingresos que empezará a perder de sus vacunas y tratamientos contra el coronavirus. Pfizer rompió todos los récords posibles durante el año pasado, cuando superó por primera vez en la historia del sector los 100 mil millones de dólares en facturación, debido a la venta de Cominarty y Paxlovid (el tratamiento oral contra el Covid-19).
De igual manera, las ganancias de la farmacéutica crecieron exponencialmente en 2022, confirmando una posición financiera sólida.
Los beneficios triplican la cifra del 2022, al terminar el 2022 con 31,4 mil millones, es decir crecimiento del 43 por ciento.
Sin embargo, estiman que la situación se revertirá. La farmacéutica neoyorkina, dirigida por Albert Bourla como director ejecutivo, ya prevé una disminución de 17 mil millones de dólares en ventas anuales entre 2025 y 2030, por el vencimiento de patentes de los principales tratamientos, a lo que se le agrega el descenso en ventas de los tratamientos contra el coronavirus, que ya se empezó a registrar, gracias al control de la situación sanitaria.
“La compañía está extendiendo sus recursos financieros para seguir avanzando en la lucha contra el cáncer, una de las principales causas de muerte a nivel global con un impacto importante en la salud pública”, aseguró el consejero delegado a través del comunicado. “Junto a Seagen buscamos acelerar los tratamientos innovadores contra el cáncer y ofrecer nuevas terapias a los pacientes a través de la combinación de los avances tecnológicos de medicamentos basados en anticuerpos de Seagen con la escala y firmeza de las capacidades y experiencia de nuestra compañía” añadió.
En la actualidad, la unidad oncológica de la farmacéutica estadounidense posee una cartera de 24 tratamientos innovadores contra el cáncer aprobados que han generado 12 mil millones de dólares en ingresos durante el año pasado.
Sin embargo, ninguno de estos supera en ventas a los de sus rivales, una lista encabezada por Merck Sharp & Dohme, Bristol Myers-Squibb, Abbvie y Johnson & Johnson.
Pfizer, una de las grandes ganadoras del covid
La vacuna del laboratorio neoyorquino se convirtió en 2022, según los datos revelados por la propia compañía, en el éxito de Pfizer.
Gracias a esta vacuna, facturó 37,8 mil millones de dólares, lo que supone un crecimiento del 3 por ciento respecto al 2021.
El segundo producto que impulsó los números de la compañía es Paxlovid, el tratamiento oral contra el coronavirus, gracias a ventas que llegaron a los 18,9 mil millones, debido a que en 2021 se lanzó este medicamento pero casi no tuvo tiempo de comercializarse (sólo 76 millones).
Un mercado congestionado
Seagen ha causado sensación en la industria con una estrategia comercial innovadora para el sector.
Con varios medicamentos exitosos ya en el mercado y una sólida cartera de nuevos tratamientos en desarrollo, Seagen se convirtió rápidamente en un jugador importante en el campo. Pfizer lo sabe y por eso puso sus ojos allí.
En el corazón de la estrategia comercial de Seagen se encuentra el enfoque en el desarrollo de terapias específicas contra el cáncer que brinden el máximo beneficio con efectos secundarios mínimos.
El producto estrella de la compañía, Adcetris, ha generado más de 630 millones de dólares en ingresos anuales.
El director ejecutivo de Seagen, Clay Siegall, ha sido fundamental para impulsar el crecimiento y el éxito de la empresa.
Siegall es un renombrado científico y empresario, con posgrado en genética de la Universidad George Washington y una sólida trayectoria en la industria de la biotecnología. Bajo su liderazgo.
Pfizer compra Seagen y suma competidores
Seagen, a punto de pasar a manos de Pfizer, compite de forma directa con rivales de la talla de Gilead Sciences, Bristol Myers Squibb y Roche, que también tienen una fuerte presencia en el mercado de la terapia contra el cáncer.
A pesar de la competencia, los ingresos de Seagen continúan creciendo. En 2022, la compañía reportó ingresos totales de 2.300 millones de dólares, frente a los 1.900 millones de 2021. Se espera que este crecimiento continúe. Se esperan ingresos por 2.900 millones de dólares en 2023.
Los inversionistas están tomando nota del éxito de Seagen, con el precio de las acciones de la compañía subiendo más del 30 por ciento el año pasado, a pesar de la crisis.
Con una capitalización de mercado de más de 31 mil millones de dólares, Seagen es una valiosa oportunidad de inversión para aquellos que buscan capitalizar la creciente demanda de terapias contra el cáncer.