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La blockchain más importante de todo el mundo de las criptomonedas busca completar su ciclo de transformaciones. Para marzo se estaría implementando la nueva actualización de red denominada Shanghái. La misma contempla varias funciones, entre las que se destaca la liberación de los fondos bloqueados en staking. Una nueva actualización está en camino para la cadena de bloques de propósitos múltiples más importante del universo cripto, Ethereum. Esa bifurcación dura estaría presta para aplicarse en marzo de 2023. Asimismo, sería la mayor que se aplica a la red desde el Merge de finales del año pasado. Este nuevo paso de los desarrolladores está compuesto de varias funciones que ahora tendrá la red. El más importante de ellos tiene que ver con la liberación de los fondos. Se trata de más de 16 millones de ETH que están bloqueados en forma de stake en la red desde hace unos dos años. Esos fondos serán “retirables”, lo que presupone el paso definitivo hacia un staking en todo el sentido de la palabra. Otras funciones de la actualización tienen que ver con las comisiones de gas para los creadores. De tal manera, las comisiones por transacciones (gas) y que generalmente son altas, ahora tendrán un costo reducido para quienes contribuyen con la red. Otras funciones relacionadas con el gas también están incluidas en Shanghái. Por otra parte, algunos analistas creen que la aplicación de esta bifurcación tiene un potencial empuje bajista para el precio de ETH. Se trata del token nativo de la blockchain Ethereum, el cual, al momento de redactar, se comercia a un precio de $1,522 dólares por moneda. ¿Las características de la nueva actualización de Ethereum? Como todos los casos anteriores de actualizaciones de esta red, Shanghái está compuesta de varias Propuestas de Mejoras de Ethereum (EIP). Las EIP son las mejoras particulares que vienen incluidas en un paquete de bifurcación dura. Cada una trae una función nueva que se aplicará a la capa para cambiar la forma en que venía ejecutándose la cadena de bloques. Para esta nueva actualización, un total de cinco EIP están dispuestas como novedad. Como ya se dijo, la más importante de ellas es la EIP-4895, la cual consiste en liberación de los fondos que hay en la red en forma de staking. Desde que se realizará el cambio de PoW hacia PoS, la seguridad de la red no depende de los mineros, sino de los fondos de los validadores. En ese sentido, fue imperativo mantener esos 16 millones de ETH de los usuarios bloqueados desde finales de 2020. Ahora que concluye ese período crítico, otro de caídas pudiera arrancar para el precio de la moneda. Son más de 16 millones de Ethers, a los que se suman casi 2 millones de ETH generados en forma de recompensa. Con una parte de esos fondos en el mercado, la presión bajista podría hacer que el precio de ETH se desplome. No obstante, podría darse el caso contrario. Lo último significa que la actualización de Ethereum haría el proceso de staking más completo y las personas no temerían quedarse bloqueadas dos años más. Así, los períodos de validación serían mucho más cortos y atractivos para los inversores que desean obtener ingresos pasivos con esta nueva modalidad de generación de Ethers. El staking es una forma financiera que se aplica abiertamente en el mercado de monedas digitales. Particularmente, es común entre las aplicaciones de las finanzas descentralizadas (DeFi) y también entre las opciones de los exchanges centralizados (CEX.) La bifurcación dura Shanghái se aplicará en marzo y es una de las más esperadas por parte de los inversores en el staking en la cadena de bloques creada por Vitalik Buterin. Con la actualización, los validadores tendrán la posibilidad de retirar los fondos que bloquearon hace dos años cuando se lanzó la Beacon Chain. Fuente: News.coincu.com Menos pagos de gas por parte de los desarrolladores La otra parte importante de este hard fork tiene que ver con el gas en la cadena de bloques. El gas es la comisión que pagan los usuarios de la red cada vez que realizan una transacción dentro de la blockchain de Ethereum. En tiempos de alto tráfico, la red se congestiona. Los cuellos de botella obligan a las personas a pagar un límite de gas mayor para ver antes concluir sus transacciones. Este es uno de los principales obstáculos que se interponen frente a los creadores en esa red. Por ello, los desarrolladores optaron por bajar la presión de las comisiones a los creadores de bloques y otras personas que contribuyen con la mejoría de la cadena de bloques. “Con la aplicación del Beacon Chain los validadores tuvieron la opción de comenzar a stakear sus monedas en la red. Ese fue el paso previo a la actualización The Merge, la cual consistió en la combinación de la mainnet con la Beacon Chain” Con la EIP-3651, se pretende hacer menos costoso el acceso a la Coinbase (no tiene nada que ver con el exchange del mismo nombre). Este se trata de un software que utilizan a disposición los validadores y los creadores de bloques en la red. “Esta EIP corrige un descuido anterior sobre el costo de acceder a la dirección de Coinbase y brinda algunos beneficios adicionales a los usuarios y desarrolladores que abren nuevos casos de uso”, expresa Matt Nelson de ConsenSys consultado en Coindesk. De este modo, la actualización de Ethereum se convierte en un punto de llegada que la hace más agradable para los desarrollos. Otras EIP relacionadas con el gas Aparte de la 3651, en Shanghái se incluyen otras propuestas que mejoran la situación con las tarifas de gas en la red. Por ejemplo, la EIP-3855 genera un código denominado Push0. Precisamente, este permite que las tarifas de gas para los desarrolladores sean más bajas. El EIP-3860, cumple una función relacionada, la cual se trata de poner un techo al costo de las comisiones para los programadores. Esta interactúa con “initcode”, un código cuya función tiene que ver con el desarrollo de contratos inteligentes. Estos son la base de las cadenas de bloques de propósitos múltiples como Ethereum. La última de este paquete es la EIP-6049. En la red existe un código llamado “Autodestruction”. La EIP-6049 lleva a que el mismo se deprecie y se notifica a los desarrolladores. Esto también está vinculado de manera directa con las tarifas de gas. Esta implementación no es la última en el camino inmediato de la cadena de bloques. Sin embargo, se trata de una decisiva para que Ethereum complete uno de los ciclos más espectaculares en la historia de las monedas virtuales. Luego de esta actualización de Ethereum, se aplicaría más tarde en 2023 el denominado “proto-danksharding”. Esta consiste en una avanzada funcionalidad para mejorar la escalabilidad de la blockchain. Para lograr ese cometido, se dividiría la red en varias “shards” o fragmentos. La aplicación de esta mejora en la escalabilidad estaba programada para principios de este año. No obstante, Shanghái parece ser más urgente, lo que obligo a que se retrasara. El precio de ETH, el token nativo de Ethereum, podría sufrir una carga bajista al momento de aplicarse el hard fork Shanghái. La razón es que más de 16 millones de ETH ($25,000 millones de dólares) quedarían en la posibilidad de ser liquidados. Algunos analistas temen una poderosa presión de venta. Fuente: Tradingview.com Los desarrolladores de Ethereum están divididos ante la actualización Al otro extremo, se destaca que la actualización no está libre de polémicas. Para algunos desarrolladores, la misma se está aplicando sin atender todos los detalles. Se trataría de una situación peligrosa que comprometería la estabilidad de la red. Según informaron algunos medios especializados, los desarrolladores están divididos sobre la pronta aplicación de esta bifurcación dura. En consecuencia, algunos desarrolladores de la red consideran que la actualización se está apresurando por motivos de presión. En otras palabras, la liberación de los fondos de los stakers sería el motivo de la precipitación de Shanghái. Los encargados estarían asustados ante una oleada de presión pública por parte de los dueños de las monedas que llevan unos dos años bloqueadas. No se debe perder de vista que esos 16 millones de monedas equivalen a unos $25 mil millones de dólares al precio actual del token. “Parece que no estamos pensando en la salud a largo plazo de Ethereum”, expresó Micah Zoltu, uno de los desarrolladores de núcleo. Algunos de los más preocupados desarrolladores recomiendan no aplicar el EIP-4895 en Shanghái. Eso implica que la actualización de Ethereum de marzo no incluya la liberación de los fondos de los stakers. En su lugar, consideran que aplicarla en la siguiente bifurcación dura “Cancun” sería más prudente para evitar la denominada “deuda técnica”. Esto equivale a los problemas futuros que pueda causar una actualización que ponga la rapidez por encima de la perfección. Dato: el próximo testnet de la red para la preparación de Shanghái, Sapolia, se aplicará el 28 de febrero y solo lo podrán probar los desarrolladores.

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