- Under Armour registra altos registros de ventas y beneficios en el último ejercicio fiscal.
- La marca espera un crecimiento estable en ingresos para el próximo año y se centrará en amplificar el atractivo global y mejorar el crecimiento de las ventas en EE. UU.
- Los ingresos del negocio mayorista aumentaron un 6 por ciento y los del canal directo al consumidor disminuyeron un 4 por ciento.
Under Armour pudo sacar a flote un trimestre complicado y es para festejar en medio de la incertidumbre de la economía global.
Así es, la empresa de los Estados Unidos terminó el último ejercicio fiscal 2022/23 con el registro más elevado tanto en lo que se refiere a las ventas como en las ganancias, esperando previsiones de tono moderado para el siguiente segmento anual: una suba estable en facturación con un incremento ligero y con un repunte de 28 puntos básicos en los márgenes brutos.
Under Armour se vió lastrada por la baja de las ventas en sus tiendas estadounidenses, su mercado clave.
Stephanie Linnartz, CEO de la fabricante de ropa deportiva, dijo que para este ejercicio tienen previsto “construir de nuevo la marca”, según sus propias palabras.
Linnartz agregó que está priorizando la amplificación del atractivo de la marca en todo el mundo; además de apuntar al fortalecimiento del diseño y a los productos de alta gama, con la potencia de la inversión puesta en sportstyle, los calzados y en la mujer.
Under Armour en 2023/2024 se quiere posicionar mejor en su mayor mercado, el estadounidense.
Volviendo a los números, Under Armour registró un aumento de la venta del 3 por ciento en el último ejercicio, casi 6 millones de euros, una tasa que asciende hasta el 6 por ciento en moneda sin el impacto de la inflación.
En detalle: las ventas del negocio mayorista aumentaron un 7 por ciento, hasta más de 3.450 millones de dólares, y para el denominado DTC cayeron un 4 por ciento, hasta 2.400 millones de dólares.
Los ingresos minoristas de Under Armour, en tanto, se vieron arrastradas por un desplome del 6,1 por ciento en la facturación de los puntos de venta propios y administradas por operadores, que compensaron en parte el incremento del 3 por ciento de los ingresos que provienen de la plataforma online.
La venta a través de Internet es un sector de negocio que supone más del 40 por ciento del ingreso de la compañía. Impresionante.
Under Armour espera un 2023 de estabilidad
Con ello, el beneficio neto de la empresa se situó en U$S 388 millones, un 4 por ciento más que para este mismo lapso pero de 2022.
Sin tener en cuento el ingreso de U$S 45 millones relacionado a la venta de la app MyFitnessPal, una ganancia de U$S 97 millones debido a descuento de valoraciones fiscales que se relacionan con la reestructuración del último período y un desembolso de 20 millones de dólares en reservas para juicios, el beneficio neto ha sido de U$S 265 millones.
Under Armour espera para el ejercicio 2023/2024 un aumento estable o con una pequeña suba y así reconstruir su nueva estrategia de marca.
Los ingresos que provienen del mercado estadounidense bajaron casi un 2 por ciento durante el 2022, hasta U$S 3.810 millones.
No fue el caso en el mercado internacional, donde los ingresos del mercado se incrementaron un 9 por ciento, hasta los U$S 2 mil millones.
Los ingresos por continente han sido: Europa, Próximo Oriente y África se incrementaron cerca del 14 por ciento, Asia Pacífico un 4 por ciento y América Latina un 10 por ciento.
Under Armour, por producto
Según las gamas de productos, el de la indumentaria ha retrocedido un 1 por ciento, hasta U$S 3.890 millones, y el del calzado creció más del 15 por ciento, hasta U$S 1.600 millones.
La línea de artículos de Under Armour de accesorios (no es fuerte en las ventas totales) marcó un crecimiento del 6 por ciento, hasta U$S 418 millones.
Únicamente teniendo en cuenta el último trimestre, periodo que va desde enero hasta marzo del presente año, las ventas de la fabricante estadounidense han crecido un 8 por ciento, hasta los U$S 1.500 millones.
Allí, el beneficio neto ajustado que se registró fue de U$S 170 millones, en comparación a las mermas de U$S 60 millones del mismo período del ejercicio anterior.